En 2023, México detuvo a 782,176 migrantes «irregulares». Hasta mayo de 2024, México reportó 590,401 “eventos de personas en situación migratoria irregular”, eufemismo usado para referirse a las detenciones. Casi 4,000 personas al día. El triple de lo reportado en el mismo periodo de 2023, 185,038 migrantes «irregulares». Es decir, que el promedio mensual subió de 37,000 en 2023 a 118,000 en 2024. Esta cifra es la más grande desde que se inició con el registro en 2001.
Por otro lado, en el comunicado 59, el Instituto Nacional de Migración reporta que «en los primeros cinco meses del año, el INM identificó a 1 millón 393 mil 683 personas extranjeras que viajaban en condición irregular», casi el doble de las personas detenidas en Estados Unidos, 785,205, y más del doble de los «eventos» reportados.
Modelo mexicano de movilidad humana
Lo anterior contrasta con la «visión progresista» que tiene México de la migración, de acuerdo con la secretaria de Relaciones Exteriores, y próxima titular de Semarnat, Alicia Bárcena.
Por ejemplo, de enero a mayo, México entregó 1,243 visas por razones humanitarias, una disminución drástica con respecto a las 68,284 visas de este tipo entregadas en el mismo período de 2023.
Además, México deporta venezolanos a su país de origen. Lo anterior gracias al polémico programa con el que les da un tipo de beca por seis meses y un trabajo seguro al regresar a Venezuela.
En marzo de este año, Jorge Vaquero Simancas, de El país México, detalló el modelo mexicano de movilidad humana. La visión progresista y humanista de México hacia los migrantes incluye la detención por 36 horas de extranjeros «irregulares», así como su traslado a la frontera con Guatemala y Belice, para que nuevamente inicien su camino hacia el sueño americano. Vaquero recoge testimonios de migrantes que dicen que los han tratado bien, sin embargo, la estrategia mexicana es cansarlos, física y económicamente.
México y EEUU contra los migrantes
Uno de los temas más importantes en las campañas rumbo a la Casa Blanca es el de los migrantes. La entrada masiva de migrantes «irregulares» a nuestro vecino del norte incide negativamente en las urnas para el que lo haya permitido. No es nada extraño que los gobiernos de México y EEUU tengan en la agenda los asuntos migratorios.
En cuanto a los migrantes mexicanos, EEUU rechaza el 80% de las peticiones de asilo porque no buscan refugio, sino mejorar su economía.
En abril, Estados Unidos confirmó, través de un comunicado, que López Obrador y Biden se comprometieron a reducir los cruces fronterizos «irregulares».
A la par, en Estados Unidos se incrementaron las deportaciones. Lo anterior, a raíz de que el 4 de junio Joe Biden anunció la orden ejecutiva para acelerar las deportaciones, hacer un proceso de solicitudes de asilo más minucioso y, claro, por la advertencia de cerrar la frontera si aumentan los migrantes.
Por otro lado, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, reconoció la entrega de recursos a otros países: “Nosotros tenemos buenas relaciones, entonces hablamos con autoridades, estamos ayudando, hemos invertido como 200 millones de dólares de apoyo a las comunidades más pobres de Centroamérica y el Caribe, mucho más de lo que invierte Estados Unidos”.
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