CAUSA Y EFECTO
Por José Antonio de la Vega Moreno
Alejandro Armenta y José Chedraui o José Chedraui y Alejandro Armenta, no importa como los acomodemos, la responsabilidad de gobernar el estado y la capital poblana, tiene grandes responsabilidades que ambos políticos no pueden omitir.
El gobernador electo, Alejandro Armenta, viene presidido de una votación histórica, vamos, se ha convertido en el hombre más votado de los procesos electorales recientes en Puebla con poco más de un millón 900 mil votos.
Pepe Chedraui, llega con toda la confianza de la ciudadanía quien le dio la estafeta el día de la elección, para poder convertirse en el segundo presidente municipal de izquierda en la cuarta ciudad más importante del país.
Armenta y Chedraui tienen la responsabilidad histórica de concluir los cimientos del segundo piso de la Cuarta Transformación en la entidad poblana.
No es poca cosa
Ambos políticos entienden de la trascendencia de su triunfo.
Ninguno de los dos lo va a tirar por la borda.
Lo que necesita Puebla son cuatro cosas: seguridad, progreso, unión y una verdadera recomposición social.
Nada qué ellos no hayan presentado en tiempos de campaña.
En una postura democrática, Alejandro Armenta, dijo ante los medios de comunicación -constancia de mayoría en mano- que no abusará de ninguna manera de la mayoría calificada en el congreso del estado.
Un mensaje de tranquilidad para sus oponentes y sus gobernados, todos.
Pepe Chedraui, una vez recibida su constancia de mayoría, señaló “no los voy a defraudar, acto seguido, invitó a todos aquellos que no votaron por él a sumarse al proyecto.
También, un mensaje reconciliador después de la contienda electoral a sus oponentes y a la sociedad en general.
Armenta y Chedraui comienzan con un gesto demócrata.
Comienzan demostrando ser políticos de altura.
Ahora, la sociedad que será gobernada por ellos así lo esperan.
Una nueva era política comenzará a escribirse en Puebla con ambos políticos gobernando el estado y la capital poblana.
Así será.