El amparo es el proceso mediante el que se reparan actos y omisiones de la autoridad que perjudican los derechos humanos y derechos fundamentales de los ciudadanos. Sirve como un cobijo de los ciudadanos frente al poder, es nuestro escudo frente a las autoridades.

Uso ciudadano

Generalmente lo hemos escuchado cuando algún personaje popular lo usa para evitar aprehensiones. Sin embargo, es un recurso que podemos usar todos los ciudadanos cuando de proteger nuestros derechos frente a la autoridad se trata.

A través de este proceso, los jueces federales determinan si algún acto u omisión de una autoridad violó nuestros derechos, y si es así, le ordena garantizarlos o restituirlos.

El amparo no sólo se usa para defender tus derechos reconocidos en la Carta Magna, también aquellos que emanen de tratados internacionales firmados y ratificados por México.

Tipos de amparo

Existen dos tipos de amparo: directo e indirecto. El amparo directo se utiliza contra sentencias dictadas por un tribunal. El indirecto se usa contra la negación o concesión de una suspensión.

También existe el amparo buscador que es «una herramienta contra la desaparición forzada de personas». Sirve para que un juez solicite la búsqueda de una persona desaparecida forzadamente. Lo puede presentar cualquier persona, en nombre de la persona desaparecida, narrando los hechos, indicando si alguna autoridad participó o permitió la desaparición (no es obligatorio), se puede presentar presencialmente o por medios electrónicos. Es importante recalcar que no importa si ya pasó mucho tiempo desde que la persona desapareció, la autoridad está obligada a buscarla mientras sigue desaparecida; aunque entre más pronto se busque habrá más oportunidad de seguirle la pista. Aquí una guía y más información sobre el amparo buscador.

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