Claudia Hernández

A 56 años del Movimiento Estudiantil de 1968, en México continúan gestándose acontecimientos organizados por alumnos de distintos niveles educativos para visibilizar las problemáticas que afectan a la sociedad.

El avance de la tecnología y con ello la expansión de las redes de comunicación y difusión también han formado parte importante de estas movilizaciones.

Sin embargo, uno de los principales motivos, que es alzar la voz, continúa motivando a la juventud para salir a las calles a denunciar y lanzar sus exigencias a las autoridades, las instituciones y a la misma ciudadanía.

En el caso del Movimiento Estudiantil del 68, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) lo define como represión ejercida por el Estado que creció de manera gradual.

Luego de que los jóvenes exigieran respeto a su derecho a la vida, la seguridad y por su puesto, a la libertad de expresión, ante una serie de detenciones arbitrarias y agresiones.

En este periodo, se documentó que el Ejército tomó diversas instituciones, y tanto la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) como el Instituto Politécnico Nacional (IPN) se fueron a huelga.

Los jóvenes convocaron a participar en una marcha desde la Plaza de las Tres Culturas en Tlatelolco para hacer públicas sus exigencias de respeto a la movilización social. Así como la disolución de los granaderos y respeto a sus derechos.

Sin embargo, la respuesta del gobierno federal fue la represión y la muerte de más de 300 personas un 2 de octubre de 1968. Una cifra aproximada porque hasta ahora continúa incierta.

DESPUES DEL 2 DE OCTUBRE DEL 68
El Movimiento Estudiantil del 68 sin duda marcó un antes y un después en la historia del país.

Además, se convirtió en un ejemplo de organización para el sector estudiantil y después del 2 de octubre en México se han dado otras movilizaciones por parte de los estudiantes.

Uno de ellos es el llamado #YoSoy132, acontecido en el año 2012 en la Universidad Iberoamericana Campus México y que más tarde provocó la unión de otras instituciones de educación superior privadas al movimiento.

#YoSoy132 se formó después de la visita del entonces candidato a la presidencia de la República, Enrique Peña Nieto, al Foro del Buen Ciudadano. Donde aceptó reprimir a los opositores del aeropuerto de la Ciudad de México en Texcoco, cuando fungió como gobernador del Estado de México.

Pese a si declaración, medios de comunicación sólo mencionaron abucheos al expresidente priista y que estos habían sido orquestados por la oposición, pero no por los estudiantes. Lo cual fue desmentido por los universitarios mostrando sus credenciales para rechazar ser acarreados o porros.

También en el sexenio de Peña Nieto se vivió un acontecimiento que generó movilizaciones en distintas partes del país: “Nos faltan 43”.

Un total de 43 jóvenes alumnos de la Escuela Normal Rural “Isidro Burgos” de Ayotzinapa, Guerrero, desaparecieron tras ser obligados a descender de los camiones que los trasladarían a la capital del país para participar en movilizaciones con motivo del 2 de Octubre.

Pero a la fecha se desconoce su paradero, el único joven presente permanece en estado vegetativo tras recibir disparos de la policía.

En Puebla un gran movimiento fue encabezado por jóvenes de distintas universidades públicas y privadas, así como de preparatorias y bachilleratos.

Por varios días arribaron por grupos a la capital poblana, cerraron vialidades y detuvieron sus actividades para exigir mayor seguridad para el sector estudiantil.

No obstante, fue hasta el 5 de marzo del 2020 que los más de 50 mil alumnos de todas partes del estado de Puebla se concentraron sobre la Avenida Juárez con destino a Casa Aguayo para pedir justicia para los jóvenes asesinados en Huejotzingo:

Ximena Quijano de 25 años, Antonio Parada de 22, Francisco Javier Tirado y José Manuel Vital de 28 años.