Un exoesqueleto es un armazón (o esqueleto externo) que cubre y protege el cuerpo de algunos animales. En términos médicos, un exoesqueleto o exoesqueleto robótico, es un esqueleto mecánico orientado a mejorar la movilidad de las personas.
Sirve para dar autonomía a personas con discapacidad o potenciar la la fuerza o resistencia de las personas para facilitar su trabajo.
Existen exoesqueletos duros, que hacen posible el movimiento del operador. También los hay blandos, que transfieren las fuerzas de los actuadores acoplados al cuerpo.
Pueden ser pasivos o motorizados. Los pasivos proporcionan apoyo mecánico durante largos periodos de pie o sentados, incluso almacenan energía en muelles. Los motorizados tienen actuadores hidráulicos, eléctricos, neumáticos, o de otro tipo.
Exoesqueletos para una mejor vida
Un exoesqueleto blando puede hacer caminar sin episodios de congelamiento a pacientes con Parkinson, por ejemplo. En 2023, un equipo de científicos de la Unidad Mixta Internacional del Laboratorio Franco Mexicano de Informática y Control Aplicado del Cinvestav, desarrolló un control para cambiar la posición de un exoesqueleto que ayuda a sentarse y ponerse de pie a personas con discapacidad.
Asimismo, la empresa ABLE human Motion, consiguió, hace poco más de un mes, el marcado CE del ABLE EXOSKELETON para uso clínico en neurrorrehabilitación. Este exoesqueleto está aprobado para usarse como dispositivo médico en la Unión Europea y podría ser útil para personas con esclerosis múltiple.
Recientemente, previo a la inauguración de los Juegos Olímpicos París 2024, Kevin Piette, deportista parapléjico, pudo caminar y llevar la antorcha gracias al uso de un exoesqueleto.
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