El día de ayer, la puerta de la calle de Moneda de Palacio Nacional fue derribada. De acuerdo con la información difundida hasta el momento, se refiere que normalistas de Ayotzinapa usaron una camioneta para abrirse paso para entrar a hablar con el presidente de la República. Los manifestantes no pudieron avanzar pues llegaron elementos de las fuerzas armadas para detenerlos. El abogado de las madres y los padres de los normalistas desaparecidos señala que no hay avances en la investigación. Además, los familiares exigen la entrega de los documentos del caso. Por su parte, el representante del ejecutivo federal no los ha recibido pese a que han mantenido un plantón frente al palacio desde hace varios días.

¿Qué piden las madres y los padres?

Recién inició el 2024, las madres y los padres de los normalistas de Ayotzinapa se reunieron con representantes del gobierno, en la Secretaría de Gobernación. Esto se dió debido al anuncio de abrir los archivos militares del caso, del 4 de enero al 4 de marzo. Exigen la entrega de información militar, entre ellos, aproximadamente 800 folios del Centro Regional de Fusión de Inteligencia (CERFI), que operaba en Iguala, así como transcripciones de llamadas telefónicas. Para ello, las familias pidieron que sea la Secretaría de Gobernación quien entregue la información, y que no sean ellos mismos los que acudan a las instalaciones militares a buscar. Asimismo, los familiares pidieron que expertas y expertos internacionales colaboren con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en la revisión de los documentos.

801 de 806 documentos que no entrega el ejército

Aunque los familiares de los normalistas exigen la entrega de 806 documentos, la versión de la Sedena es que entregó sólo 5 de ellos y el resto, 801, la Secretaría de la Defensa Nacional desconoce su existencia.

Los «misteriosos» 801 documentos no entregados son los correspondientes al CERFI. Dentro de estos folios, hay uno en el que, de acuerdo con madres y padres de los normalistas, refieren que llevan a 17 alumnos para quitarles la vida.

Luis Cresencio Sandoval, secretario de la Sedena, informó de manera oficial al presidente de la República que estos documentos no están en sus manos. Al mismo tiempo, señaló que los folios 687, 695, 1194, 1363 y 1375 sí fueron entregados a los familiares de los normalistas de Ayotzinapa.

Los folios referidos como entregados, documentan la revisión de un taxi del EdoMéx y una conversación sobre «actos de inseguridad» relacionados con personas inconformes, 4 autobuses y «actos vandálicos».

De acuerdo con las familias, es en esta conversación donde Gildardo López Astudillo, miembro del grupo criminal «Guerreros Unidos», da instrucciones a Francisco Salgado Valladares, subdirector de la Policía Municipal de Iguala, Guerrero, de entregar a 17 normalistas. Ante esta exigencia, Luis Cresencio Sandoval pide a los familiares de los estudiantes que acudan con el propio López Astudillo.

¿Qué dijeron los expertos?

El Grupo interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) realizó una investigación paralela a la «oficial», de marzo de 2015 a abril de 2016. Este grupo, el GIEI, abandonó las investigaciones ante la negativa del gobierno de entregar los folios faltantes. El 25 de julio de 2023, en el auditorio del Centro Cultural Tlatelolco, entregó su sexto y último informe.

De promesa de campaña a…

Al ser una bandera que el actual gobierno usó para llegar al poder, pase de lista incluída, se esperaba que el caso ya estuviera resuelto, pero no solamente se ha negado a entregar documentos, o ha desconocido su existencia, también cuenta con 114 restos óseos sin analizar.

Se trata de una recomendación de la CNDH, en 2018, que consta de 2 mil 177 páginas y 128 puntos, donde se pide analizar 114 restos óseos en la Universidad de innsbruck. La CNDH determinó que «41 porciones petrosas, 26 cóndilos mandibulares, 14 demilunares, 12 ganchosos y 21 elementos odontológicos» contienen materia orgánica que es susceptible de análisis.

Estos restos fueron recuperados en el basurero de Cocula, Iguala, por el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF). Los resultados del análisis de estos restos podría confirmar o negar la hipótesis del basurero. Por lo pronto, parece que esta investigación tendrá que esperar un sexenio más, por lo menos…

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