La guerra ha sido una parte clave de nuestra historia desde el inicio de los tiempos. En la escuela nos enseñan sobre La Primera Guerra mundial, La Segunda Guerra Mundial, La Guerra Fría, independencias, revoluciones y tantos otros conflictos conocidos por mera cultura general, pero también existen otras guerras verdaderamente curiosas que vale la pena recordar por sus peculiaridades.
La Guerra del Emu, Australia 1932
¿Quién iba a pensar que estos simpáticos animales provocarían una guerra de gran escala? El gobierno australiano y varios granjeros hubieron de enfrentarse a bandadas de emús que estaban causando estragos en los cultivos. Estos animales, rápidos y ágiles, burlaron a las autoridades al grado que fue necesario involucrar soldados y ametralladoras y aun así el ejercito terminó por retirarse. Vaya anécdota tan peculiar en la historia militar de Australia.
La Guerra del Futbol, entre Honduras y El Salvador 1969
También conocida como “La Guerra de Las Cien Horas”, esta batalla fue desencadenada por tensiones políticas y sociales, exacerbadas durante un partido de clasificación para la Copa Mundial de la FIFA. Duró unos días y sin embargo fue volviéndose tan violenta que fue necesaria la intervención de La Organización de Estados Americanos para negociar un alto al fuego. A pesar de ser poco conocida, esta guerra tuvo un fuerte impacto en la región y puso al descubierto las tensiones entre ambos países y sus consecuencias en el ámbito internacional.
La Guerra de La Oreja de Jenkins, entre Gran Bretaña y España, 1739
Este conflicto fue desencadenado por un incidente en el que el capitán británico Robert Jenkins afirmó que los españoles le cortaron la oreja durante un registro de su barco. Jenkins llevó su oreja amputada al parlamento británico como evidencia, lo que reanimó las tensiones entre ambos países y se manifestó en una larga batalla naval que carecía de sentido .