Por Claudia Hernández
Tanto bares como antros, encontraron en las cercanías de entornos escolares la manera de obtener ingresos con el mínimo esfuerzo.
Lo anterior, a pesar de que el Código Reglamentario Municipal (Coremun), señala que la distancia para abrir un negocio de este tipo debe estar alejado al menos 200 metros de las instituciones.
A través de Google Maps, es posible encontrar al menos seis cercanos al polígono de Ciudad Universitaria de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP).
Pero unas calles después, la cantidad aumenta, eso sin contar aquellos que no aparecen por operar desde la clandestinidad. Es decir, sin ningún tipo de permiso o licencia para brindar sus servicios con el “visto bueno” de Protección Civil y Bomberos.
Estas situaciones no sólo representan la clausura definitiva por parte de las autoridades municipales, sino un peligro para quienes acuden en caso de registrarse un siniestro.
El 18 de enero, Martín Carbajal Segura, encargado del despacho de Normatividad dio cuenta de 29 clausuras a antros y bares de esa zona.
Como era de esperarse, la falta de licencias o su vencimiento, fueron los principales motivos para colocar los sellos y evitar que continúen operando.
A decir del ayuntamiento de Puebla, la mayoría de los bares o antros que obtuvieron la licencia para estar cerca a Ciudad Universitaria las solicitaron a la anterior administración municipal.
Antros y bares de CU de Puebla, sede se peleas entre universitarios
El 19 de octubre del 2023, el bar “Una y más”, ubicado cerca de la Facultad de Arquitectura fue sede de una riña entre universitarios.
Después de consumir bebidas alcohólicas inició una pelea campal que fue reportada por vecinos a la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
A su arribo, al menos cuatro personas quedaron detenidas y el lugar fue cerrado por no contar con los permisos de funcionamiento.
Consumidores del espacio afirman que tanto su servicio como el personal dan malos tratos e incluso, que exigen hasta un 20 por ciento extra por el servicio.
Meses atrás en marzo y también en CU, el bar Beirut fue clausurado a sólo unos días de ser inaugurado.
En su momento, Normatividad detalló que, aunque el sitio tiene licencia de restaurante-bar, tenía más bebidas alcohólicas que alimentos y con ello, cometía un cambio de giro sin previa notificación y documentación correspondiente.
Por esta falta, fue acreedor a una multa de 300 Unidades de Medida y Actualización (UMA’S), es decir, 31 mil 122 pesos.
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