Forbes | Patricia Tapia

Kekén quiere ser la punta de lanza en innovación en la sustentabilidad porcícola en México, y ya está en ese camino, pues es la primer empresa en el país y el mundo que ha desarrollado su propio sistema de tratamiento para la optimización de uso y recuperación del agua que utiliza en sus procesos.

Con su proyecto “Meta Descarga Cero 2025”, la empresa de producción de carne de cerdo que pertenece a Grupo Kuo va por cero descarga de aguas residuales, y reutilizar 100% que consume en sus procesos en todas sus plantas y granjas.

“Hasta donde sabemos no existe en México ni en el mundo un proyecto similar a este, en ese sentido somos innovadores, pioneros, y queremos ponernos como una punta de lanza en la porcicultura, (…) somos parte de la Asociación Ganadera Local de Porcicultores de Mérida, y lo que se desarrolla aquí es compartido”, indicó Miguel Carbajal, director de Sustentabilidad de Kekén. 

Este proyecto “Meta Descarga Cero 2025”, se divide en tres fases: la primera es el ahorro de agua, la cual ya está en curso, en 5 años han logrado un ahorro de su consumo en 50%, pero no le fue suficiente con esto y buscó llegar más allá. 

“Fue en estos años en que estábamos haciendo todo este detalle de ahorro que nos dimos cuenta y empezamos a sacar preguntas y decir: ¿oye y si vamos un poco más allá y la hacemos recircular? y nos decían ‘oye, ¿pero es que eso no se ha hecho en la industria?’. Entonces, como que te pones en la frontera de romper paradigmas del cómo hacer las cosas”, dijo.

Kekén empezó a trabajar en un proyecto piloto en una de las granjas de su planta de Kinchil, en Yucatán, en donde han descubierto que pueden recircular hasta 70% del agua. 

“Ya estamos convencidos de que sí se puede recircular, lo que vamos a hacer de ahora en adelante es que a todas nuestras instalaciones vamos a implementar este circuito“. 

Y la tercera fase y más ambiciosa es la descarga cero de aguas residuales y reutilizar 100%, para lo cual se va a invertir en ecotecnología para una circulación permanente del agua, de acuerdo con la estrategia presentada por Carbajal en un recorrido por su planta de Kinchil. 

“Hoy gracias a las alianzas que tenemos con los centros de investigación, estamos buscando la mejor tecnología, para ver qué hacemos con esa agua que resta, y estamos viendo si la vamos a evaporar o electrolizar, es decir, separar el hidrógeno por un lado, el oxígeno por otro”, indicó. 

Carbajal no descartó que en este camino vayan surgiendo más oportunidades, una de estas es la producción de hidrógeno verde, para quizá usarlo como combustible para su flota de vehículos. 

Este año, la productora de carne de cerdo se dedicará a hacer las estimaciones de la inversión que se requiere para implementar este sistema en todas sus granjas. 

“La meta es que para 2025 logremos dominar el 100% de recirculación y que no se descargue ni una sola gota de agua”, adelantó. 

Para Kekén la optimización del uso de agua en sus procesos es el corazón de su plan de sustentabilidad, pues un proyecto de economía circular. 

Parte del proceso de tratamiento de agua implica la separación de sólidos, una vez que estos han sido biodegradados con bacterias y es una materia orgánica que tiene altos niveles de nutrientes, debido a que la base de alimentación del cerdo son granos, se está usando como fertilizante. 

“Hoy estamos ofreciendo y haciendo investigación respecto a cómo utilizar de manera adecuada y optimizar el uso de este material como fertilizante, y es uno de los proyectos más ambiciosos que tenemos, porque vemos la posibilidad de activar o detonar la agricultura local“, señaló Carbajal.  

Ahora con el proyecto piloto ya ofrecen estos biosólidos de manera gratuita a 300 agricultores, algo que consideran importante en el contexto de alza en el precio de los fertilizantes por el conflicto de Rusia-Ucrania.

Kekén también ha sufrido por esta invasión de Rusia a Ucrania, pues los precios de los granos que son el alimento de los cerdos ha incrementado, pero la compañía está mitigando ese impacto para que no haya un alza en el precio de sus productos.

Señalamientos de contaminación

Kekén ha sido señalada por la contaminación del agua en la Península de Yucatán por la descarga de aguas residuales y del aire por los olores de las granjas, Greenpeace se ha pronunciado en diversas ocasiones por esto.

Respecto a esto, el director de Sustentabilidad de Kekén comentó que son respetuosos de los discursos de las ONGs, pero es un hecho que sus plantas cumplen con toda la normatividad (tienen 2 en Yucatán y una en Irapuato)

“Nuestra manera de responder es trabajar y con hechos”, refutó. Además, se han hecho 35,000 consultas a las comunidades.

Alicia Núñez, gerente de Sustentabilidad de Kekén, agregó que las autoridades correspondientes seguido les realizan visitas.

“Particularmente esta instalación (de Kinchil) ha sido visitada por todas las autoridades en la materia, solamente el año pasado, recibimos dos de Conagua, en 2020 fueron dos de Profepa; la Secretaría de Desarrollo Sustentable del Estado también ha venido a constatar el impacto”, aseguró Núñez.

También explicó que cada 3 meses se hacen análisis de lodos y de las aguas residuales; “son las autoridades las que acreditan el cumplimiento, Conagua, laboratorios certificados, consultores externos, entre otros”, detalló.